Algo de vida

 
Los días transcurren con aletargada lentitud, más el  corazón se va graduando,
 con luz serena, aunque el foco, ajeno y lejano, solo da oscuridad a la existencia.

 Solo la memoria en el recuerdo, conserva algo de luz,
 la única que sigue en contacto con la vida.

 Ella solo siente el hilo de luz que fluye, en ese mundo suyo donde, la música en  fragancia de  poesía vive,  vivir así
 suavemente, y que la vida  la acerque  ha la muerte que ya desea.

 Sus pensamientos y actos son pequeños,  livianos, como el de los pájaros recién nacidos, donde el nido es la seguridad de sentir,
 que las alas crezcan, para la paz de su espíritu.

Entonces su cuerpo no vacilara al incorporarse, y su mano, será firme,
 sus pensamientos adquirirán otra vez, esa sabiduría, serena y segura
 en su vida, y un ancho suspiro volara de su pecho.

 Estrenara un nuevo cielo, un sol, una sonrisa….aunque se sienta
 imprecisa, insegura y lejana, de esa primavera,
 que será aun más fuerte que la  existencia que siente, donde el ritmo la ahogará,
 y tomara carreras, a escondites donde el llanto calmara el esfuerzo, que le pondrá a su 
vida.

 ¿Quien le había alejado de la vida? ¿Por qué sombras, borrascas, y mentiras anduvo.?

 
Extraviada en su vida, se busca a ella misma.

 Sabe que no puede gritar, porque hay un frío y aislador entre ella y el mundo.


Se había perdido a sí misma.

 
 ¿Qué castigo? ¿Qué pena insospechada aún se le impondrá algún día?
 
Más

Ella vivirá, en esa paz, que se parece al secreto del amor, en ese silencio,  que solo habla, desde el corazón, y para el corazón, donde la soledad reflejara, la propia sombra que trasmite  s
u figura, la  que siempre fue suya.
 
El misterio.
 
 Pilar A.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy querida amiga no hay soledad,
no temas.
Los abrazos te llegaran, para esa fuerza de vida que necesitas.
Un fuerte abrazo
Vicente Fernández