Tengo el corazón lleno de ti que me alimenta,
y en mis manos las carias ultimas
donde aún siento, la emoción
de entregártelas.
Caricias que acortan la distancia
en los placeres,
de tu cuerpo, y el mío,
cuando se quedan en uno solo.
Comulgamos con los
sentimientos del alma,
sublimes y confundidos,
buscamos las palabras
agrupadas,
para decir algo
que llegue al Alma.
Porque allí todo toma fuerza y vida misteriosa,
donde la tremenda pasión puede dar fiebre al Alma.
que llegue al Alma.
Porque allí todo toma fuerza y vida misteriosa,
donde la tremenda pasión puede dar fiebre al Alma.
Pilar A.
2 comentarios:
Mi querida Pilar
Sublime tu poesía
preciosa metáfora
que pocos son capaces de sentir.
Felicidades.
Víctor.
Haia
Misteriosa y apasionada de los secretos que guarda el alma.
Bello poema.
Carlos Solís
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