Mis quimeras

Sigues en mí
¿no sé porque?
Y no te invento,
no te reclamo,
pero sigues en mí.
Pero tú en otro lado
en otro planeta
practicando tu magia en el amor,
en horas eternas.
Buscando eternos destinos,
y descubriendo, cielos con nubarrones
desconocidos…
¿Y no sé porque sigues en mí?
Si yo estoy al margen de todo
como limpia de penas
como olvidada de deseos,
sumergida en la ignorada
como si nunca hubiera vivido en ti.
¿Por qué te has ido?
¿Porque no llenas mi mente de sueños?
¿Y nuestras quimeras?
Donde se han ido ¡Dios!!
¿Y si fuese verdad que tú me piensas?

4 comentarios:

ALBINO dijo...

Si estuviera en la edad correspondiente, es decir, equivalente a la tuya, este poema me haría pensar mucho en ti. Como creo que la he pasado en mucho, disfruto leyéndolo.
Besos

PD. Te deje mi logotipo, una vieja maquina de escribir, entre tus segudores. Por favor, dejame tu rostro en el mio.

Haia dijo...

Las personas caminamos juntos cuando nos unen las mismas aficiones, gustos y placeres sin importar la edad.
La poesía es el alimento del enamorado de la vida, y del otro…
Muchas gracias por tu linda visita. UCUYAYA

maniaurbana dijo...

Mira que interesante, aquí hablas entre tus líneas, de irse de alguna manera "desvistiendo de las penas": eso me gusta mucho, es usar la experiencia para no sufrir y tu estás más allá de cualquier sufrimiento, llena de vida, juventud y bueno, tanta alegría que me gustaría ya mismo estar contigo compartiendo un café en las calles de tu Ávila (que quiero conocer), de algúna esquina madrileña o de cualquier otro lugar del mundo porque finalmente donde estemos tomaremos un café lleno de palabras mágicas como los tomados alguna vez en Quito y otras ciudades de Ecuador.

Pilar, estás muy linda en todas las fotos. Joven, coqueta y contagiosa.

Un fuerte abrazo

Haia dijo...

Querido amigo, gracias por tu lindo y, sentido comentario.
Nuestra amistad remite a una vivencia rica en alegrías, llantos, pero sobre todo respeto, esa unión de amigos que vivimos, donde dimos de nosotros lo mejor, la admiración, el amor, pero sobre todo la filantropía.
Hoy ese episodio de mi vida lo recuerdo con nostalgia, y siento en mi corazón la necesidad del próximo café, y hare lo posible para que suceda lo necesito, necesito al poeta que hay en vos, porque se que aun no se ha hecho realidad esa frase tuya “vendo mi vida, cambio mi vida, de todos modos la llevo perdida” (León de Grey)
Todo mi cariño para vos…