El recuerdo

Aquel amor,
dejo sentimientos duraderos
fue un hombre amado.

El deslizaba su mano por el rostro
mojado,
en una ducha matinal
y sin mirarse al espejo
la cuchilla hacia su ritual de afeitado.

Los rituales cotidianos
estaban llenos de amor
era aquel amor sin ataduras
sin sentimientos atados
pero vivos
como la sangre en nuestras venas.

Hoy no hay tormentos,
sino el recuerdo del episodio de una vida
que no tuvo ataduras.
Pero si sentimientos de un amor que perdura
que acompaña.
Pero que me deja ser feliz

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